PASION

Para algunos es la pintura, otros la música, algunos el deporte, otros se apasionan por las mujeres, los carros antiguos, las nuevas tecnologías, la última moda, las compras de barata, el ejercicio, la comida algunas por los hombres calvos, otros por las mujeres gorditas ¡sí! ¡Existen toda clase de pasiones!
Sabemos que es una emoción tan fuerte que nos toma desprevenidos y nos puede hacer cometer tonterías, recuerdo que a mi primera novia de secundaria me le arrodille por casi media hora hasta que me dijera que si , después cuando me acepto, me fui corriendo hasta mi casa por casi 30 minutos con la mochila en la espalda eran como 10 kilómetros de distancia cargando como 5 kilos de libros, pero mi corazón explotaba de pasión , era imparable, me tire en la cama repitiendo su nombre
Pero también podemos reconocer cuando ya no la tenemos, cuando al paso del tiempo perdemos esa chispa (que más bien es un combustible) , nuestra generación no necesita Viagra para tener noches de pasión o estar perdida bajo el influjo del alcohol para desinhibirse, lo que requiere es dos corazones que puedan encontrarse en medio la penumbra de sus problemas, bajen sus voces y en lugar de gritos, se hablen con la ternura que solo el corazón sabe hablar, miradas dulces que reanimen el espíritu, ternura de abrazos que sanen la soledad y aspereza con la que el mundo nos hiere
Lloramos la perdida de nuestros queridos, por no haberles podido expresar todo lo que les amamos, lloramos en sus tumbas, les llevamos flores, cantos, hasta hablamos con ellos es un gesto gentil y noble. Mientras tanto nos perdemos la oportunidad de amar con pasión a los que aún tenemos con nosotros, nos volvemos exigentes, demandantes y hasta tiranos con ellos, nos olvidamos de cantarles canciones de amor y ternura., de avivar la pasión perdida
Para colmo a eso, a eso, le llamamos: ¿madurez?
Mi tierra está llena de indiferencia creada por la ambición de tener en lugar de ser, por afirmar posición en lugar de convicción, confundimos crecer con vegetar, mantenemos la distancia pues que ya no queremos mostrar pasión, preferimos crujir los dientes antes que soltar una lagrima de ternura, creímos la mentira de que la ternura es una debilidad humana
Nada hay más falto de pasión que la religiosidad, buscando dictar reglas de conducta prohibiendo a diestra y siniestra, dictando un sí y no a cada movimiento que hacemos
La Biblia no es un libro de reglas, es una carta de amor escrita con la pasión la cual solo Dios sabe mostrar, en cada una de sus páginas se encuentra una anhelo por acercarse a su creación y caminar de la mano con él, sé que él me ama con pasión, cuando escribo esto estoy en una montaña a varios kilómetros de distancia de la civilización, puedo oír con claridad el viento y la temperatura es muy agradable, pero más claro que todo puedo sentir su pasión por mi, ¡sí! , Él ya me lo mostro en la cruz, Él no tiene miedo de amar, es una voz suave, tierna como solo el corazón sabe hablar ¡caray! si mi corazón siente pasión; ¡imagina la pasión de Dios por ti!

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FELICIDAD

…Y fueron felices para siempre!
Yo se que este el final de muchas historias de fantasía de esas que creíamos cuando éramos pequeños, nos dormíamos soñando en que así sería la vida, creíamos en lo que el libro decía. Pero si somos honestos; es el final de la historia que deseamos para nuestra vida, ser felices para siempre o bueno algo como:
Encontrar a la pareja perfecta
Tener la casa de nuestros sueños
Viajar a donde siempre hemos deseado
Poder contar con alguien de forma incondicional
Que nuestros hijos no sufran ningún dolor
Vivir sin presiones económicas o escases

Tarde o temprano nos damos cuenta que el camino a la felicidad está lleno de obstáculos, dolor, presiones, traiciones, perdidas, escases, decepciones, desprecios, errores, imperfecciones, etc.
¿Pero es posible el ser feliz? esta es una pregunta sería para cada uno de nosotros pues no importa la edad seguimos teniendo ilusiones, seguimos soñando en lo que deseamos, ya no anhelamos un juguete especial o una aventura fantástica, ya somos más concretos y queremos algo especifico
Aquí es donde la realidad debe y puede superar a la fantasía, existe un relato que siempre me ha llamado la atención, me da un ejemplo de lo que yo y Dios podemos hacer juntos para ser felices: Pablo se encontraba en prisión por sus convicciones, no había hecho nada malo o digno de estar en la cárcel, fue llevado por las presiones sociales y religiosas de su tiempo y comenzó a cantar con todas sus fuerzas
El calabozo donde estaba pablo era un cuarto con paja en el piso como único mobiliario, sin luz o ventilación y puesto que no había baños , el mismo estaba lleno de heces y orina como aromatizante de ambiente , si, no era un lugar que inspirara a un hombre a cantar, en medio de ese lugar Pablo levantaba su voz y cantaba a Dios con su amigo Silas, tomaba aire, el mismo aire enrarecido a su alrededor y seguía cantando , no había muchos espectadores a su alrededor, solo algunos prisioneros lo oían y claro pensaban que estaban locos para cantar de gusto por estar en la cárcel en esas condiciones
¿Por qué cantaba pablo?
Porque decidió ser feliz, se limitó a ser feliz y a disfrutar ese momento en comunión su señor , tu y yo nacemos con la habilidad solo que la hemos hecho a un lado y la hemos forrado de quejas y puesto un candado de tristeza con una etiqueta que dice: “si no recibo lo que quiero no seré feliz” nos perdemos la emoción de experimentar y cerramos la llave del gozar las cosas por más simples que sean

Al momento de escribir esto pienso en un niño al cual le compre un juguete sencillo, pero como el no recibía un juguete nuevo nunca, le di la sorpresa de su vida, me sentí hasta mal de lo contento que lo vi, pensé que debía de haberle comprado algo mejor, pero no, él era feliz con lo que le di, sus ojos cantaban de alegría literalmente
La decisión de cantar es mía, la decisión de ser feliz también, de disfrutar el placer de vivir, pues todo lo que nos suceda será temporal pues aún existen muchas aventuras de las cuales es mejor que me ría de ellas
La historia de Pablo no termina con un final feliz, sino sobrenatural, al estar cantando vino un terremoto en la cárcel de tal magnitud que todos los presos y el mismo Pablo fueron libres, es ahí donde yo entiendo que yo hago mi historia y El (Dios) escribe sobre la mía y le da un final feliz
Puedes leer la historia en Hechos 16:11-40
Yo he decidido ser feliz el día de hoy ¿y tú?
¿Hace cuánto has dejado de cantar?

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